FELIZ NAVIDAD 2014
Con esta divertida imagen del Maestro Herge, quiero desearos una Feliz Navidad, para todos y todas
miércoles, 24 de diciembre de 2014
MARVEL, 75 AÑOS DE SUEÑOS ( II )
En 1961, la editorial que habría de
ser Marvel Comics arrastraba deudas y problemas, destacando únicamente por sus cómics de
monstruos y por el trabajo de dos de sus dibujantes estrella, Jack Kirby y Steve
Ditko. No obstante, pronto un hito lograría que su revitalización comenzase. En
noviembre de 1961 aparecía “Fantastic Four”, una serie en la “onda” de los
superhéroes y que rápidamente se ganó el favor del público gracias,
fundamentalmente, a la caracterización mucho más realista y familiar que la de
otros títulos superheroicos. Definitivamente, Los 4 Fantásticos y su enorme
éxito propiciaron la aparición de otras series y personajes, como Astonishing
Ant Man en enero de 1962, The Incredible Hulk en mayo de 1962, Spider-Man en el
último número de Amazing Fantasy en agosto de 1962, Thor en el número de
Journey Into Mystery de agosto de 1962, Iron Man en el número de Tales of
Suspense de marzo de 1963, la Avispa en el número de Tales to Astonish de junio
de 1963 y el Doctor Extraño en el número de Strange Tales de junio de 1963. El
éxito de estos personajes hizo que la compañía, que ahora respondía al nombre
de Marvel Comics, se lanzase a publicar más series de superhéroes; en
septiembre de 1963 debutarían The Avengers y los X-Men, Daredevil, en abril de
1964, mientras que personajes de los años 40 como Namor y el Capitán América
protagonizarían sus propias series, el primero en Tales to Astonish y el
segundo en Tales of Suspense, en agosto de 1965 y noviembre de 1964
respectivamente. El último personaje de aquella etapa grandiosa sería Nick
Fury, un personaje que protagonizaba historietas bélicas desde 1963, pero que
sería remozado a partir del número de Strange Tales de agosto de 1965,
convirtiéndose en un agente secreto integrado dentro del universo ficticio de
Marvel. Por aquella década, Stan Lee funcionaba como “chico para todo”,
principal guionista, editor literario y artístico. No obstante, el aumento de
la carga de trabajo de Lee y la mejora de las ventas permitió contratar a
nuevos guionistas, dejando algunas de las series en manos de los jóvenes
escritores Roy Thomas, Denny O'Neil y Gary Friedrich. El inesperado éxito de
Marvel atraería el interés de un grupo inversor que compró la compañía, con la
intención de hacer de ella la principal editorial americana de cómics. Eso
llevó a una sucesión de redactores jefe: Roy Thomas, Len Wein, Marv Wolfman,
Gerry Conway y Archie Goodwin. Stan Lee fue abandonando los guiones en favor de
un puesto más ejecutivo, mientras que Jack Kirby dejó de dibujar para la
compañía y saltó a DC Comics, si bien volvería brevemente entre 1976 y 1978;
otros autores “top” como Jim Steranko o Neal Adams también fueron abandonando
Marvel. Sin embargo una nueva generación de guionistas y dibujantes entrarían
para dar continuidad a las colecciones y producir grandes etapas como La tumba
de Drácula de Marv Wolfman, Gene Colan y Tom Palmer; el pato Howard de Steve
Gerber; el Capitán América de Steve Englehart; los X-Men de Chris Claremon, Dave
Cockrum y John Byrne; y otras muchas que marcaron a toda una generación e
aficionados. A partir de aquí, llegó la época de los directores editoriales,
que marcaron nuevas, y no siempre, afortunadas líneas de trabajo, con Jim
Shoter, 1978-1987, Marvel lanzó una nueva línea editorial, el “Nuevo Universo”,
conmemorando el 25º aniversario de Marvel en 1986. También fue responsable de
nuevos y amplios crossover “Contest of Champions”, “Secret Wars”. En 1981
Marvel adquirió el estudio de animación: DePatie-Freleng Enterprises que había
creado a los famosos Looney Tunes, pasando a ser Marvel Productions Ltd., comenzando
a producir series de animación para la televisión como G.I. Joe, Transformers e
incluso los Muppet Babies de Jim Henson. En 1986 Marvel fue vendida y vuelta a
vender a diversas compañías, culminando, en fin, con la adquisición del
catálogo animado a cargo de Disney. En 1988 la Marvel Comics de McFarlane, Jim
Lee o Liefeld, fue comprada el magnate Ronald Perelman. Los problemas
comenzaron en 1991, cuando estos artistas estrella de Marvel se marcharon a
crear una nueva editorial, Image Comics. Marvel intento capear el temporal
invirtiendo en juguetes, cartas coleccionables, etc, basadas en su enorme
archivo de personajes, y , fundamentalmente, la creación de su propia
distribuidora. Con todo, los malos resultados en general propiciaron la caída
de ventas y, consecuente saturación de material, desconvocaría en el cambio de
propietarios Joe Quesada
como nuevo redactor jefe y el éxito de las primeras películas de Marvel dieron
un respiro a la editorial. La Marvel de Quesada se apoyó en nuevos formatos de
impresión, líneas como MAX para adultos, Marvel Age, para jóvenes, o Ultimate
Marvel, con nuevas versiones de los héroes más clásicos. La era Quesada concluiría
en 2011, siendo sustituido por Axel Alonso.
jueves, 11 de diciembre de 2014
MARVEL, 75 AÑOS DE SUEÑOS ( I )
Aunque todos la conocen ahora como Marvel
Comics, realmente la más popular de las editoriales de superhéroes del mundo,
nació en 1929 bajo el nombre de Timely Publications de la mano de un joven
empresario de 31 años llamado Martin Goodman. Dos años antes, Goodman, había
comenzado su carrera, con una pequeña editorial de revistas pulp llamada
Western Fiction Publishing. Pronto ampliaría su oferta editorial hacia el, por
entonces, floreciente negocio de los cómics, contratando los servicios de Funnies
Inc., un taller de escritores y dibujantes especializado en crear cómics para
editoriales que no tenían el dinero o el tiempo suficiente para crear su propia
plantilla. Ante el ambiente prebélico de la Segunda Guerra Mundial, Timely
enfrentó a sus superhéroes con las fuerzas nazis, dos años antes de que Estados
Unidos entrase en la contienda. Sus primeros héroes fueron Namor, la Antorcha
Humana o el Capitán América, golpeando al propio Hitler en la portada de su
primer cómic. A partir de 1941, una vez los EEUU ya en guerra, el abanico de
villanos se amplió, apareciendo también los japoneses y, ocasionalmente, los
italianos. El público acogió la política antinazi de Timely con entusiasmo,
como demuestran las ventas de Captain America Comics, que rozaron el millón de
ejemplares vendidos. Sin embargo, debido a desencuentros internos, sus
estrellas Joe Simon y Jack Kirby abandonaron la editorial. Kirby volvería 15
años después, y Simon jamás lo hizo. Goodman pondría como nuevo editor a su
propio primo, Stanley Lieber (Stan Lee), aunque al año siguiente fue reclutado
por el ejército y tuvo que ser sustituido por el dibujante Vince Fago. En los
años siguientes la oferta superheroica continuaría, pero nuevos títulos con otras
temáticas ocuparían su espacio. Aunque, a su regreso en 1945, Stan Lee volvió a
apostar por los superhéroes, los gustos del público habían cambiado definitivamente
hacia géneros como humor, bélico, adolescente, terror, suspense, ciencia
ficción, salvaje oeste. crimen, romance etc. Desafortunadamente, los
superhéroes fueron desapareciendo poco a poco. Además, en 1949, el nombre de la
editorial sufrió varios cambios en logos y denominaciones, unas veces como
Marvel Magazine y otras como Marvel Comics. Con todo, el fin de los superhéroes no supuso
ningún revés para la empresa de Martin Goodman, que en 1950 publicaba más
títulos que nunca realizados por una plantilla de unos veinte artistas que
cobraban un sueldo fijo. A partir de ese momento, 1951, los cómics aparecerían
bajo el logo de Atlas Cómics. Estos cómics se caracterizaron por seguir tocando
todos los géneros de éxito ya mencionados. En 1953, Atlas hizo un nuevo intento
por recuperar a los superhéroes, basándose en la Antorcha Humana, Namor y Capitán América, pero, desafortunadamente, en
1955 los personajes ya habían vuelto a desaparecer de los kioscos. Una de las
causas fundamentales que propiciaron esta decadencia fue la campaña orquestada
por determinados grupos de presión, alentados por un ensayo escrito, en 1954,
por el psiquiatra Fredric Wertham, “La seducción del inocente”. En su tesis describía
los cómics como una forma inferior de literatura popular que corrompía a la
infancia y una de las principales causas de la delincuencia juvenil, implantando
un código de conducta ultraconservador y, teóricamente, protector para el gran
público, especialmente enfocado a los
jóvenes, consiguiendo que los Cómics tuviesen muy mala prensa en general. La
mayoría de las editoriales acabaron adhiriéndose al mencionado código, pero
esto no evitaría la caída de ventas en general y, sobre todo, el hecho de que
las editoriales dejaran de ser rentables. La caída de ventas hizo que Atlas
News llegase a un acuerdo con una de sus rivales, DC, que aceptó distribuir un
máximo de 8 títulos al mes, aunque dejaron de presentar el logotipo de Atlas.
Reducidos al mínimo, Goodman aún contaba con un excelente grupo de
profesionales como el guionista y editor Stan Lee y los dibujantes Jack Kirby,
Steve Ditko, Don Heck, Joe Sinnot, Dick Ayers y Paul Reinman, sobre sus
espaldas se edificaría la gran Marvel de los sesenta….
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